Economía Circular en Casa
¡Tú puedes practicar Economía Circular Casera! Quizás hayas escuchado el término economía circular, quizás no, pero es preciso que sepas que tus acciones como individuo pueden impactar a la economía mundial.
Después de todo, la economía la hacemos las personas ¿cierto?
La Economía Circular en palabras simples, es un sistema en el que se diseñan procesos que reduzcan el uso de materiales vírgenes, optimiza los recursos y minimiza la cantidad de residuos que se generan.
Esta definición suena extraña en una sociedad en donde todo se toma, se hace y se desecha. Pero hoy en día cada vez más países, ciudades, grandes empresas y emprendedores están adoptando este sistema para evitar un colapso ecológico en el planeta.
Seguro estarás diciéndote: “Todo esto suena muy bien, pero ¿qué puedo hacer yo en todo eso?”.
¡Pues mucho! Si eres un emprendedor o empresario, tu lugar principal estará en cuestionarte cómo funciona lo que estás creando u ofreciendo.
Pero, ¿y si eres una de esas personas que no tiene planeado inventar un nuevo aparato en el mundo? ¿También puedes hacer algo? ¡Claro que sí! Aquí te vamos a decir cómo en tres simples ejercicios.
Economía Circular Casera: Tu Diario del Cambio
Lo primero que necesitas para cambiar tu estilo de vida a uno de Economía Circular Casera, es un Diario del Cambio. Este será un cuaderno donde anotarás todo lo que vayas observando y reflexionando.
¡Cuidado! ¡Porque esto es adictivo! Una vez que comiences a detectar tus hábitos, continuarás haciéndolo con todo lo que compres, comas y hagas. Así que prepárate porque en menos de dos meses, serás un detective de este tema.
Cómo leer las Etiquetas de los alimentos
No hay términos medios para estas chicas, o son escandalosas o increíblemente discretas. Nosotros buscaremos todas. Sí, todas. Finalmente serán juzgadas por lo que tienen que decir y no por su apariencia. En nuestra búsqueda nos acostumbraremos a saber de dónde provienen nuestras cosas y de qué están hechas.
¿Dónde compras?: Economía Circular Casera en el Super
Uno de los pilares de este sistema es consumir menos y local. Mientras menos hayan viajado nuestros productos, menos combustible se vertió al medio ambiente y más apoyo daremos a la economía local.
Ejercicio: durante este mes anota en tu diario todo lo que compres. En cada hoja debes hacer cuatro columnas. Una para el nombre del producto o su función, otra para el lugar donde lo compraste, otra para el lugar de elaboración y otra para el precio.
Desde un chicle hasta un sofá, todo estará registrado. Por ejemplo:
| Nombre o función | Comprado en: | Elaborado en: | Precio |
| Helado | Heladería La Michoacana | Las mismas instalaciones donde lo compré | $25 pesos |
| Shampoo | Walmart | USA | $250 pesos |
| Contenedor plástico para alimentos | Tiendas de descuento | China | $15 pesos |
El último domingo del mes revisaremos lo que la lista negra contiene. Al final responde las siguientes preguntas:
- ¿En qué lugares fueron elaboradas todas las cosas? Puedes hacer listas parciales o porcentajes. Por ejemplo, seis artículos fueron elaborados en China, cuatro en Bangladesh, diez en México, etc.
- Si tú hubieras elaborado ese producto ¿lo que pagaste sería un precio justo? ¿crees que lo que pagaste por él realmente es lo que te costaría producirlo, distribuirlo y venderlo?
- Elige al azar tres productos. Sin investigar, trata de describir en una hoja de tu diario el proceso que tuvieron que pasar para llegar a tus manos, desde la extracción de la materia prima a la llegada a la tienda.
- ¿Cuántos de todos los productos son indispensables en este momento en tu vida diaria?
- Los productos que provienen de otros países ¿hay manera de conseguirlos producidos en tu propio país?
Dime cómo te vistes y te diré quién eres:
Economía Circular Casera en la moda
No solo es importante estar al tanto de dónde proceden las cosas que tenemos, sino qué vamos a hacer con ellas en el futuro. La clave de un sistema circular es que los materiales no se desechen, sino que se reintegren al sistema de producción nuevamente o que puedan ser reutilizados varias veces.
Ahora iremos al ropero. Este ejercicio no solo te integrará a la Economía Circular Casera, también te hará limpiar el desorden de una vez por todas.
Ejercicio: en tu diario, harás cuatro columnas en cada hoja. En la primera irá el nombre de tu prenda, en la segunda el o los materiales de los que está hecha, en la tercera cuánto tiempo de vida útil le queda según tu apreciación y el uso que le das, y en la cuarta qué harás con ella cuando llegue a su fin.
Durante esta semana, registrarás cada día toda la ropa que utilices. El domingo reflexiona lo siguiente:
- ¿Qué porcentaje de mi ropa es de fibras naturales y cuánta de fibras sintéticas?
- ¿Realmente necesito toda esta ropa? De todo lo que utilicé en la semana ¿podría desprenderme de tres prendas sin cambiarlas por otras nuevas?
- ¿Cómo dispongo de mi ropa cuando ya no la utilizo? ¿La entrego en donación, la vendo, la regalo, la reutilizo para hacer bolsas, pañuelos, trapos?
Quiero generar menos basura y llevar una vida más saludable.
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Ensuciándonos las manos
La estrella de este sistema es lo que hoy llamamos “basura”. La basura o residuos no existen en un sistema circular, ya que todo es aprovechado de una u otra forma. Pero no solo es importante reutilizarla, sino evitar en lo más posible, generarla.
Para el ejercicio de este punto necesitarás un par de bolsas para envolver tus manos, o un par de manos (y un olfato) muy valientes.
Antes de empezar anota en tu diario tres columnas: una para el tipo de residuo (lata de verduras, bolsa de papas fritas, botella de soda), otra para el material del que está elaborado, casi todos contendrán también papel por la etiqueta (aluminio, plástico metalizado, plástico y papel plastificado) y la última, para el tiempo que la usaste (por ejemplo, la lata de verduras sirvió para una comida, la bolsa de las papas y la botella de soda se usaron por 15 minutos, no es el tiempo de almacenamiento, sino el tiempo en que cumplieron su función contigo).
Empecemos.
Ve al primer sitio de tu casa en donde tengas un bote de basura, vuélcalo en el suelo y anota en tu diario dónde está ubicado y qué contiene en las columnas correspondientes.
Haz lo mismo con todos los botes de la casa y al terminar reflexiona lo siguiente:
- Selecciona solamente los residuos que hayan tenido un tiempo de vida útil de entre una hora a unos segundos. ¿Es posible que los sustituyas por productos comprados a granel o que lleves tus propios recipientes o bolsas para comprarlos?
- ¿Cuánta basura de la que hay se podría haber evitado si organizaras eficientemente tus compras, consumos, horarios?
- ¿Podrías haberla evitado si pensaras dos veces antes de comprar algo?
- ¿Pudiste elegir opciones más limpias? Por ejemplo un helado en vaso o uno en cono.
- ¿Estoy separando mi basura? ¿Mi ciudad tiene algún programa de reciclado? Si no lo sabes investígalo en internet.
Una Economía Circular no es exclusiva de las grandes empresas, la implementamos todos con nuestras decisiones diarias.
Haciendo estos tres ejercicios empezarás a ser consciente del cambio que puedes generar en tu vida, en tu comunidad y en todo el planeta. Cuando hablamos del problema del agua, de la basura o de los ecosistemas devastados, no son ajenos a nosotros. Es el problema de mi agua, el problema de mi basura y el problema de mis ecosistemas devastados. Y si todos somos parte del problema, todos somos parte de la solución. Eso es un círculo.
💡 Revisa la versión en inglés de este artículo en Circular Economy Club
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